Las biopsias de riñón son importantes porque pueden ayudar a su médico a saber qué está causando su síndrome nefrótico y qué tan grave es. Esto les ayudará a elaborar su plan de tratamiento. Es posible que se realicen biopsias adicionales más adelante para ver cómo está funcionando su tratamiento.
¿Por qué biopsia?
Para adultos
Es más probable que los médicos especialistas en riñones recomienden una biopsia en pacientes adultos cuando se les diagnostica por primera vez.
Los resultados de la biopsia ayudarán a determinar qué está causando el síndrome nefrótico de un paciente y pueden ayudar a guiar el tratamiento.
Para niños
Los nefrólogos generalmente recomendarán que un niño se realice una biopsia si:
- Tienen ciertos hallazgos clínicos cuando se les diagnostica por primera vez (como antecedentes familiares de síndrome nefrótico).
- No responden al primer ciclo de prednisona (“resistentes a los esteroides”).
- Inicialmente respondieron a los esteroides, pero gradualmente se volvieron menos receptivos, tienen recaídas frecuentes o no pueden dejar de tomar esteroides (“dependientes de esteroides”).
- Tienen hallazgos inusuales, como función renal anormal.
El procedimiento de biopsia
Las biopsias generalmente las realiza un nefrólogo o un radiólogo intervencionista.
Las biopsias a menudo se realizan después de una sedación ligera o anestesia local.
Se toma una pequeña porción de tejido de un riñón mediante una aguja especializada para que un patólogo renal la examine bajo un microscopio.
Después de una biopsia, se recomendará actividad limitada o reposo en cama durante un período de tiempo.